Tras la ruptura del pacto anunciada por José García Molina

El gobierno de García-Page seguirá tratando de negociar los presupuestos con Podemos

No contempla la opción de tener que pactar con el PP y recuerda que ya se tuvieron que prorrogar las cuentas de 2015 hasta aprobar las nuevas el pasado mes de abril

José García Molina, líder de Podemos en Castilla-La Mancha, y el presidente de la Junta, Emiliano García-Page.
José García Molina, líder de Podemos en Castilla-La Mancha, y el presidente de la Junta, Emiliano García-Page.

El anuncio de Podemos de que rompe el pacto de legislatura que mantenía con el PSOE ha pillado a la Junta de Castilla-La Mancha en medio del proceso para aprobar en las Cortes regionales los presupuestos para 2017. Pese a la ruptura del acuerdo, el gobierno autonómico no renuncia a intentar un acuerdo antes de verse abocado a la prórroga.

“Nos hemos enterado por la rueda de prensa”: así responden fuentes del gobierno de Castilla-La Mancha a El Confidencial Autonómico sobre el anuncio realizado por José García Molina, líder regional de Podemos que compareció con el otro diputado morado para anunciar que “el acuerdo de investidura ha muerto”.

Podemos denuncia que Emiliano García-Page lleva más de un año actuando “espontánea y unilateralmente” y más pendiente de resolver la crisis interna del PSOE y de “decapittar a Pedro Sánchez” que de gestionar el gobierno castellanomanchego.

El vicepresidente de la Junta salió a responder a García Molina y aseguró que hace unos días estuvieron reunidos con los dos diputados de Podemos para negociar aspectos del proyecto de presupuestos regionales para 2017 que tendrán que ser supervisados por el Ministerio de Hacienda. Ni en ese encuentro ni en otros anteriores notaron ningún signo de ruptura del pacto por parte de Podemos.

De hecho, los socialistas salieron a achacar esta decisión sorpresa de Podemos a las luchas internas que vive la formación morada entre los partidarios de Pablo Iglesias y los de Íñigo Errejón.

Si se prorrogan, seguirán negociando en 2017

En todo caso, ahora mismo el PSOE queda en minoría en las Cortes de Castilla-La Mancha: tiene 15 diputados frente a los 16 del PP, ya que los dos de Podemos sumaban esos 17 que les da justo la mayoría absoluta.

La ruptura se produce en un momento clave, ya que la Junta necesita aprobar sus presupuestos generales para el año que viene. Pero fuentes del ejecutivo castellanomanchego aseguran a El Confidencial Autonómico que no dan por perdido el proyecto de presupuestos que aprobó hace unas semanas el consejo de gobierno de García-Page.

Se agarran al “período de reflexión” que, según dijo José García Molina, va a abrir Podemos en Castilla-La Mancha para decidir qué pasos da a partir de ahora. Esperan que sea lo más corto posible, y que termine con una vuelta a los acuerdos con el PSOE.

Sea como sea, en el ejecutivo regional están decididos a seguir negociando las cuentas para 2017. Lo harán con Podemos y hasta la fecha límite, el 31 de diciembre, antes de que se tengan que prorrogar los de 2016.

Y si se tuvieran que prorrogar, seguirán en enero intentando convencer a Podemos de aprobar la ley de presupuestos. Las fuentes consultadas por ECA explican que ya a finales de 2015 no se pudieron aprobar en tiempo y de hecho no fue hasta abril de este mismo año cuando entraron el vigor las cuentas de 2016.

 

La opción que descartan de plano en el ejecutivo de Emiliano García-Page es la de girarse hacia el PP para tratar de salvar las cuentas. Aseguran que las políticas del PSOE están tratando precisamente de revertir los recortes aplicados por Cospedal en sus cuatro años de gobierno en Castilla-La Mancha, por lo que no ven que exista siquiera una posibilidad de negociar con los populares.

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