‘Bullying’, inmigración y cambio climático: la nueva Educación para la Ciudadanía en Extremadura

La consejera Esther Durán explicó que su departamento está trabajando en un proyecto de decreto que regule los contenidos curriculares de la ESO y Bachillerato a partir del próximo curso. Entre los pilares de la reforma se encuentra la pretensión de recupear Educación para la Ciudadanía, la polémica asignatura que creó el Gobierno de Zapatero a nivel nacional y que eliminó el ejecutivo de Rajoy.

La Junta plantea que desde el curso 2016/2017 los alumnos extremeños estudien Educación para la Ciudadanía en 2º ESO y Ética y Ciudadanía en primera de Bachillerato. En ambos casos serán asignaturas de libre configuración autonómica: es decir, que son de las materias que pueden incluir y diseñar sus contenidos los gobiernos de las comunidades autónomas.

Este proyecto de decreto está todavía siendo analizado por los distintos órganos consultivos, peroEl Confidencial Autonómico ha podido consultar el contenido propuesto por la Consejería de Educación de Extremadura para estas asignaturas.

Lo que estudiarán en 2º de ESO

En el caso de Educación para la Ciudadanía, que se estudiará en el segundo curso de la ESO, “serán claves nociones tales como el valor de la persona y su construcción moral, las relaciones interpersonales, la dimensión histórica de la ciudadanía o los derechos humanos”.

La asignatura se estructurará en seis bloques: 1) Contenidos transversales, sobre comunicar de forma escrita y oral; 2) La dignidad del ser humano; 3) Las relaciones interpersonales; 4) La democracia como sistema político, en el que se estudiará la Constitución Española; 5) Los derechos humanos; y 6) La ciudadanía en el siglo XXI.

Entre los llamados “estándares de aprendizaje evaluables” destacan, por ejemplo, que hay varios que hacen hincapié en formar en la igualdad entre hombres y mujeres: se valorará que los alumnos “aprecien la necesidad de defender a la mujer de cualquier acción que ataque su libertad y su dignidad” y que analicen “de forma reflexiba reclamos publicitarios que denigran a la mujer”.

Además introduce conceptos más recientes, ya que los escolares tendrán que posicionarse “críticamente respecto a actitudes intolerantes en el aula como el bullying”. También será materia de reflexión el fenómeno de la inmigración.

En cuanto a temas más políticos, entre esos “estándares de aprendizaje evaluables” estará el apreciar la “conexión existente entre la guerra y la violación de los Derechos Humanos” y defender que el diálogo es la mejor herramienta para evitar la violencia.

También se tratará el tema de la separación de poderes y el uso del poder, para argumentar “críticamente por qué el uso del poder político no debe confundirse con el abuso del mismo. Y un asunto muy debatido: explicar por qué “la escasa participación ciudadana es un riesgo para los sistemas democráticos”.

Y un detalle histórico: los alumnos tendrán que seleccionar relatos de distintas fuentes para conocer de cerca casos de “víctimas de la represión política en la historia reciente de Extremadura”, así como analizar “los atentados contra los derechos humanos habidos en la historia reciente de Extremadura, desde la Segunda República hasta la Transición”.

Cambio climático e igualdad LGTB

Por su parte, en el proyecto curricular consultado por ECA el gobierno extremeño define también los contenidos para Ética y Ciudadanía, en 1º de Bachillerato. La materia tiene un enfoque más filosófico para estudiar la noción de ciudadanía democrática.

Se divide en tres bloques: la ética y la buena vida, la política y el problema de la justicia, y ética y política en nuestro tiempo.

Si en Educación para la Ciudadanía se incluyen conceptos nacidos en los últimos años, como el bullying, en Ética y Ciudadanía los estudiantes de Extremadura aprenderán sobre los principales problemas medioambientales, como el cambio climático, y reflexionarán sobre los problemas que plantea el uso de las tecnologías de la información: el derecho a la privacidad, el ciberacoso, la adicción a las tecnologías de la comunicación, o los delitos informáticos.

Varias cuestiones evaluables harán referencia a uno de los aspectos que más polémica causaron cuando Zapatero lanzó Educación para la Ciudadanía: el enfoque sobre la sexualidad, que algunas asociaciones de padres y colectivos consideraron que chocaba con la libertad de los padres a educar a sus hijos en los valores que eligiesen.

Si el proyecto de la Junta sigue adelanto, los alumnos de 1º de Bachillerato tendrán que “valorar la importancia de la vida afectiva y sexual para nuestro desarrollo como personas y analizar desde saberes humanísticos y científicos, y con talante filosófico, cuestiones fundamentales de la afectividad y sexualidad humanas”.

En este ámbito, deberán investigar “sobre los aspectos fundamentales de la normativa nacional y autonómica relacionada con los derechos de la mujer, la prevención de la violencia de género y la igualdad LGBT” y participarán en “dinámicas de grupo sobre igualdad de género, sexual y por orientación”.

Desde la Consejería de Educación explican que tras pasar por la Mesa Sectorial de Educación, donde están representados los sindicatos, el proyecto acaba de llegar al Consejo Escolar de Extremadura, donde se debatirá en comisión y pleno. Este órgano asesor podría proponer modificaciones que la consejería puede decidir incluir, por lo que el contenido puede variar hasta que el Consejo de Gobierno apruebe el decreto.