Vea vídeos de la protesta desde dentro

“¡Cobarde, guarro, hijo de puta!”: así acosaron policías de Madrid al concejal de Seguridad

Decenas de agentes municipales esperaron a Javier Barbero, que tuvo que refugiarse en un bar, para insultarle y pitarle con silbatos

Manifestación de policías municipales contra el concejal de Seguridad.
Manifestación de policías municipales contra el concejal de Seguridad.

La decisión del ayuntamiento de Madrid de disolver una de las dos Unidades Centrales de Seguridad, dedicadas a labores antidisturbios, ha provocado una “revuelta” en parte de la plantilla de la Policía Municipal. Un grupo de agentes se movilizó contra el responsable de la decisión: el concejal de Seguridad, Javier Barbero.

Primero se concentraron cerca de las dependencias municipales en la Plaza de la Villa. Cuando Barbero salió de la reunión de la Comisión de Seguridad, le estuvieron siguiendo por la calle Mayor entre gritos en los que le acusaban de “cargarse” las UCS.

Ante la presión de los manifestantes, el concejal de Seguridad se vio obligado a “refugiarse” en un bar a la espera de que le recogiera un coche oficial y los escoltas de la Policía Municipal que se encargan de su protección.

El Confidencial Autonómico ha tenido acceso a vídeos que los participantes en la protesta grabaron desde dentro de la concentración que “acorraló” al concejal de Ahora Madrid en una calle. Muchos de ellos llevaban silbatos para pitar: otros, alguna pancarta e incluso banderas de España.

Entre los gritos de “¡fuera!” y abucheos, los policías municipales también empezaron a corear “¡Cobarde!¡Cobarde!” por haberse metido en un bar ante la presión.

Los ánimos al ver aparecer a Javier Barbero, entre que salió del bar y se metió en el bar, se caldearon hasta el punto de que algunos agentes, de forma aislada, profirieron graves insultos contra Javier Barbero: “¡Hijo de puta!”, “¡cabrón!” e incluso “¡guarro!” fueron algunos de los que se pudieron escuchar.

En otro de los vídeos a los que ha tenido acceso ECA, se ve cómo los agentes rodean el coche camuflado en el que los escoltas se llevan al concejal de Seguridad. Ahí se oyen hasta gritos de “¡fascista!” dirigidos contra el concejal por haber disuelto una unidad de los antidisturbios municipales.

Cuando Barbero ya estaba en el vehículo, hubo breves momentos de tensión porque algunos manifestantes comenzaron a golpear el maletero y los laterales del coche.

 

Los insultos terminaron cuando el coche se puso en marcha. “¡De puta madre!¡Qué bien ha estado!”, gritaron los policías entonces, y se abrazaron entre ellos.

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