Las razones de los antidisturbios para rechazar cambiar de sede en Madrid

Todo surgió cuando la Comunidad de Madrid cerró la academia de policías locales que tenía en Tres Cantos y llegó a un acuerdo con el Ministerio del Interior para cederle estas instalaciones a cambio de que los agentes municipales pudieran formarse en la academia de la Policía Nacional en Ávila.

De esta forma, Interior se hizo cargo del complejo. En febrero de 2014 se empezó a barajar que estas instalaciones de Tres Cantos -municipio al norte de la ciudad de Madrid-, por el momento vacías, podían convertirse en la nueva sede de las Unidades de Intervención Policial (UIP), es decir, de los antidisturbios.

Los rumores sobre este cambio de sede han sido constantes en el último año. Recientemente, el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, aseguró en una revista del cuerpo -y concretamente en una carta que dirigía a los miembros de las UIP- que esperaba que “pronto podamos inaugurar una nueva base en Madrid más amplia, más moderna y operativa”, en referencia a los planes para hacer de las instalaciones de Tres Cantos la nueva base de la unidad antidisturbios.

Tiempo de reacción más lento

Este proyecto, sin embargo, choca con la opinión contraria de buena parte de los policías que estás destinados en las UIP de Madrid. Desde el Sindicato Unificado de Policía señalan a El Confidencial Autonómico las razones que tienen para oponerse al traslado desde el complejo policial de Moratalaz -distrito del este de la capital-, donde actualmente tienen su sede, a las instalaciones de Tres Cantos.

El motivo principal es la desventaja que ven a la situación de la base de Tres Cantos con la actual. “Las instalaciones de Moratalaz están bien ubicadas, y con buena conexión por carreteras: la M-30, la M-40, la A-3...”, señalan fuentes internas de la UIP, que añaden que desde esta localización llegan rápida y fácilmente a cualquier punto de Madrid, incluido el centro de la ciudad, en caso de urgencia.

Sin embargo, el tiempo de reacción de los antidisturbios se alargaría si en vez de salir con sus furgones desde Moratalaz lo hicieran desde Tres Cantos, advierten desde el SUP. En primer lugar, por la distancia, y en segundo lugar porque sólo una carretera, la M-607, une este municipio con Madrid.

“Si por un accidente o por atasco se bloquea la carretera, no podríamos llegar a Madrid”, afirman las fuentes de las Unidades de Intervención Policial consultadas por ECA. Por contra, como ya se ha señalado, desde el barrio de Moratalaz hay varias salidas posibles para llegar al centro de Madrid y a cualquier otro punto de la ciudad y de la región.

La existencia de una única carretera para llegar desde la base de Tres Cantos a Madrid puede suponer también un riesgo para la seguridad de los policías nacionales de las UIP: “Al haber un único camino y tener que pasar siempre por él obligatoriamente, es mucho más fácil que alguien organice un atentado contra nosotros en la carretera”.

Además, El Confidencial Autonómico ha podido saber que los mandos superiores de las Unidades de Intervención Policial hicieron un informe en el que desaconsejaban el traslado. Uno de los motivos que esgrimían era el coste elevado que supondría acondicionar las instalaciones de Tres Cantos: “Hay que instalar vallas, cámaras y otros elementos de seguridad que ahora no hay”, explican fuentes conocedoras del proceso.

Los rumores del traslado se han vuelto a desatar entre los miembros de las UIP de Madrid: ahora incluso con un plazo máximo de dos meses para trasladarse de Moratalaz a Tres Cantos. Sin embargo, muchos mandos operativos de los antidisturbios no saben aún qué decisión final tomará el director de la Policía.