PP y PSOE diseñan una estrategia para ser el socio preferente del PNV en el País Vasco
Han dado orden de tender puentes con los nacionalistas de cara a las autonómicas. Tanto Rajoy como Sánchez les necesitan para ser investidos
A poco más de dos semanas para las elecciones autonómicas vascas del 25 de septiembre, PP y PSOE ultiman sus respectivas campañas electorales. Ambos partidos están, según las encuestas, muy parejos en cuanto a intención de voto se refiere. Su objetivo es superarse, el uno al otro, para ofrecer al PNV un apoyo en Euskadi que pueda ser correspondido por los nacionalistas en Madrid.
Según explican a El Confidencial Digital dirigentes nacionales de ambos partidos, las encuestas que se manejan tanto en Génova como en Ferraz apuntan a una victoria holgada del PNV, que podría repetir los 27 escaños de hace cuatro años. Por detrás de los nacionalistas se situarían EH Bildu y Podemos, mientras que PP y PSOE se disputan ser el cuarto partido en la región.
En 2011, ese puesto lo ocuparon los populares con seis escaños, mientras que los socialistas fueron la tercera fuerza con diez. La irrupción de Podemos afecta ahora a ambas formaciones, pero especialmente al PSOE, que se sitúa en una intención de voto muy similar a la del PP. Los últimos estudios demoscópicos les sitúan a ambos con 8 escaños.
Batalla por ser el socio del PNV
Los dos grandes partidos, por tanto, pelean entre sí para quedar por encima del otro y, de esa manera, tener mayor opciones de llegar a un acuerdo con el PNV para la gobernabilidad del País Vasco en la próxima legislatura.
La tesis de Génova y de Ferraz es que los nacionalistas, después de observar cómo ha acabado Convergència en Cataluña tras pactar con ERC, buscará un socio de gobierno diferente a EH Bildu. Además, ni PP y PSOE quieren que el PNV se abrace a los abertzales en un momento de máxima tensión territorial.
Con ese argumento, evitar un pacto PNV-EH Bildu, ambos preparan una campaña con un mismo mensaje: “Votadnos para ser la llave de un gobierno constitucionalista en Euskadi”.
La Moncloa como objetivo de fondo
Ambos partidos no quieren, ni por asomo, un gobierno entre nacionalistas y abertzales. Pero además, tanto Mariano Rajoy como Pedro Sánchez son conscientes de que alcanzar un acuerdo con el PNV en el País Vasco podría abriles a ellos las puertas de La Moncloa.
El presidente en funciones está, tras la nueva investidura fallida de ayer, a tan solo seis síes de lograr una mayoría absoluta que le garantice seguir en el cargo. El PNV tiene justo ese número de escaños en el Congreso, por lo que un pacto en Vitoria puede facilitar también otro en Madrid entre las mismas formaciones.
Pedro Sánchez, por su parte, no ha renunciado a ser alternativa a Rajoy y ya el pasado mes de julio tendió puentes con los nacionalistas en conversaciones reservadas. Desde Ferraz, además, ven mucho más factible que el PNV busque el apoyo de los socialistas que de los populares, ya que “en esta legislatura hemos trabajado juntos”. Además, añaden, “nos preferirán a nosotros antes que al PP para intentar sumar también a Podemos”.
Los primeros espadas, a Euskadi
Tal es la importancia que PP y PSOE dan a las elecciones vascas que ambos partidos enviarán a sus primeros espadas a la campaña para intervenir en las próximas dos semanas.
En el PP confirman que habrá una gran presencia del Gobierno en la región, con Mariano Rajoy a la cabeza. Además, también se harán presentes en importantes actos de campaña dirigentes nacionales del partido: además del vitoriano Javier Maroto, en Génova apuestan por llevar también a María Dolores de Cospedal.
En el PSOE, por su parte, ya han confirmado que Pedro Sánchez viajará por lo menos una vez a cada una de las tres provincias vascas. De hecho, este domingo ya participará en un acto de pre-campaña en San Sebastián junto a la candidata,Idoia Mandia. Patxi López, como ex lehendakari, también tendrá un papel importante en los actos del partido.
