Un respiro para la Generalitat valenciana: Se ha archivado la denuncia de una asociación ciudadana contra el presidente Fabra por prevaricación y falsedad documental
La Asociación contra la Corrupción en la Comunidad Valenciana presentó hace unos meses una denuncia contra el presidente Alberto Fabra y el alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, que no prosperará en los juzgados. El líder regional asegura que los promotores de la acción "sólo buscaban, con intereses muy concretos, perjudicarnos a dos personas no imputadas".
Según ha podido constatar El Confidencial Autonómico, fue el presidente de la Asociación contra la Corrupción en la Comunidad Valenciana, Enrique Soriano, quien denunció a Fabra y a Bataller por contratar a dos auxiliares cuando Fabra era alcalde de Castellón y alegar que no trabajaban para el Ayuntamiento, sino para el partido.
El archivo de la denuncia por parte de la Fiscalía, sobre la que informó en un primer momento este confidencial, supone un ‘balón de aire’ dentro de la convulsión judicial que padece estos días el PP de la Comunidad Valenciana.
El pasado lunes se abrió el juicio oral contra el ex conseller Rafael Blasco y el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana admitió estar valorando si procede imputar a Rita Barberá y Francisco Camps por el ‘caso Nóos’.
De acuerdo con la resolución judicial a la que ha tenido acceso ECA, el fiscal ha determinado que el grupo municipal popular destina a sus auxiliares “al lugar que estima que pueden prestar mejor servicio”. Concluye que no hay en el nombramiento, ni en el ejercicio posterior de la función “ningún actuar penal”, y por tanto “procede al archivo”.
De dónde viene la denuncia
La Asociación que ha promovido esta denuncia se constituyó en abril. Sólo se conocía al presidente, Enrique Soriano, y hay muy poca información sobre sus miembros. Una de sus primeras acciones fue denunciar al conseller Serafín Castellano, secretario general de los ‘populares’ valencianos.
Fuentes del PPCV indican que esa denuncia parecía, a su juicio, un “aviso” contra alguien. Tenía todo el aspecto de “una venganza surgida en el seno mismo del partido”, según declararon a este digital.
Todo apuntaba a que, si Fabra seguía con su plan de apartar de su cargo o del PP a alguno de los acusados de corrupción política, llegaría una nueva denuncia “contra un cargo muy importante del PPCV”.
Hubo quienes vieron al instigador en el ex conseller Rafael Blasco. En aquel primer momento estaba resisitiéndose a dejar su acta de diputado en las Cortes Valencianas por su vinculación en el ‘caso Cooperación Internacional’. El juicio oral de este caso se inició lunes, estando ya Blasco en el grupo mixto de las Cortes.
“Tras el archivo de la denuncia contra Fabra”, indican a ECA fuentes ‘populares’, les han quedado tan claros “los fines y torpeza” de esta asociación que “no parece que vaya a actuar más”, pero tampoco es “descartable”.
