Críticos de Podemos en Galicia, Canarias, Cataluña... exigen cambios a Pablo Iglesias
Están impulsando internamente un manifiesto en el que reclaman más transparencia y horizontalidad
El desgaste de Podemos que monopolizó el debate político tras su fundación y éxito en las elecciones europeas ha llevado a la corriente crítica a organizarse. Se autodenominado Bases Podemos y piden volver al origen del partido morado.
Según pudo conocer El Confidencial Autonómico, este colectivo ha presentado un manifiesto fundacional llamado “Quiero mi Moto” en alusión al sueño fallido que les prometió el partido.
Aseguran que en un principio se organizaron en círculos para arreglar el problema social y político que había aparecido en España. Aseguran que la asamblea ciudadana fundacional en el Palacio de Vistalegre que se celebró en octubre de 2014 supuso una inflexión en el partido morado, aseguran las fuentes consultadas.
De hecho, en el manifiesto de Bases Podemos aseguran que se sienten como preferentistas. “Nos vendieron una moto y luego nos la hurtaron con la maldita letra pequeña”, afirma el documento.
El sector crítico lamenta que las bases han perdido la ilusión inicial del proyecto. Dieron mucho tiempo e incluso recursos económicos para apostar por Podemos por ese motivo reclaman la soberanía popular, transparencia y horizontalidad.
Por si parte, como sostienen en el manifiesto, afirman que los círculos han cumplido su parte del “contrato”. Ahora reclaman a la otra parte, la dirección del parido, que cumpla con lo acordado.
Desde Bases Podemos explican que es posible construir un proyecto político de estructura piramidal invertida y que se pueden desarrollar unas normas que generen una democracia interna en una organización política. Y así evitar los “amiguismos” y “enchufismos”.
Por ejemplo, los críticos de esta corriente en Galicia aseguran que del consejo ciudadano regional se han marchado las personas que fueron más votadas por desacuerdos con la dirección. Como fue el caso de Carmen Santos que obtuvo más apoyos que el propio secretario general del partido regional, Breogán Riobóo.
El documento fundacional acaba con un órdago a la dirección de Podemos. Aseguran que si no cumplen con lo prometido, serán ellos mismos los que se organicen para impulsar un proyecto políticos distinto.
