La Unión Europea afirma que el Corredor Mediterráneo no es “su única prioridad” en transporte para España. Advierten que el Eje 16 y el Corredor Atlántico “no han caído en el olvido”

Esta semana ha tenido lugar en Valencia un seminario que ha reunido a todos los sectores españoles implicados en el Programa sobre las Redes Transeuropeas de Transporte entre 2014 y 2020. Este plan contempla las rutas e infraestructuras que la Unión Europea quiere priorizar. Tanto los eurodiputados como los responsables de Fomento han declarado que el Corredor Mediterráneo no va a significar el "descarte" ni del Corredor Atlántico ni del Corredor Central o Eje 16 y que no habrá agravios comparativos entre proyectos.

“El proyecto del Corredor Central no va a quedar diluido por el éxito del Corredor Mediterráneo o el Atlántico”. Ésta ha sido una de las conclusiones del seminario sobre Redes Transeuropeas de Transporte que ha tenido lugar en Valencia este lunes. Según ha podido saber El Confidencial Autonómico, uno de los objetivos del encuentro ha sido dejar claro que los tres proyectos de corredores de transporte en España son “igual de importantes”.

La polémica entre las autonomías que apoyan cada uno de esos corredores ha sido permanente desde hace años y se ha recrudecido últimamente por la cuestión del reparto de fondos para cada proyecto, que se está discutiendo ahora en la Unión Europea. Según los asistentes al seminario en Valencia, “esas luchas nos perjudican a todos”.

“La importancia del Corredor Central no debe de quedar en el olvido ni menospreciarse, dado su trazado logístico, histórico y los proyectos que le apoyan”. Así explican desde la Oficina del Parlamento Europeo en España la necesidad de respaldar el resto de proyectos de transporte, entre los que destaca el Corredor Mediterráneo.

En estas jornadas han participado los eurodiputados Luis de Grandes (PP), Inés Ayala (PSOE) e Izaskun Bilbao (PNV) y miembros del Ministerio de Fomento, la Comisión Europea y la dirección general de Transportes.

Los tres corredores y sus apoyos

El Corredor Mediterráneo implica a las comunidades de Cataluña, Valencia y Murcia. Supone una vía de comunicación para transportes y mercancías que une las ciudades de Figueras, Barcelona, Tarragona, Valencia, Alicante, Murcia, Almería, Granada, Antequera y Algeciras. Ha sido definida en este seminario como un ejemplo “de éxito”, pero no “el único” que debe recibir fondos y apoyos europeos.

En las instancias europeas al Corredor Central se le conoce como el Eje 16. Se trata de una galería ferroviaria que une Sines, Algeciras, Madrid y París a través del Pirineo aragonés. Se dedicará al transporte de mercancías y su construcción comenzará en 2020 y finalizará en 2030. También se ha denominado Travesía Central del Pirineo.

Además de Aragón, esta vía de comunicación implica a Extremadura, Castilla la Mancha y Madrid. Según explican a este confidencial fuentes del Gobierno de Aragón, este Eje 16 no entra en competencia con otros que puede haber en España. La tesis aragonesa es que este corredor se dedica al tráfico de mercancías, mientras que en los otros viajan sobre todo pasajeros: no compiten, sino que convivirán.

El tercer proyecto en discordia, el Corredor Atlántico, es también mixto –pasajeros y mercancías– y transcurre por Castilla y León, País Vasco, Principado de Asturias y Galicia. Cuenta con conexiones en red con localidades como Ávila, Medina del Campo, Valladolid, Miranda de Ebro y Vitoria y otro ramal con León, Oviedo, Gijón, Salamanca y Lisboa, entre otras.

 

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